[Narra
Harry]
Gracias
a dios no causamos mucho revuelo en el aeropuerto. Nadie sabía a dónde íbamos,
no se había filtrado por Internet. Además a las seis de la mañana no había
mucha gente en el aeropuerto. Era pequeño pero aun así había probabilidades de
que no las encontrásemos.
No me
lo podía creer. No podían irse. Estaba desesperado. No quería ni pensar que no
estuvieran en este aeropuerto… Estaba intentando concentrarme, pensar que
podíamos hacer. Separarnos no era lo mejor porque Zayn no estaba en condiciones
de ir por ahí solo…Me distraje. Alguien se reía muy fuerte en la zona de espera
para embarcar. Dios, qué risa más fea. Era como una foca chillando. Ahora que
lo pensaba ya había escuchado esa risa antes. Si, pero, ¿dónde? ¡En el
concierto de Ed! ¡Era la risa de Liz! Así se reía Liz cuando algo le hacía
mucha gracia. No era posible… ¡Estaban allí! Avisé a Niall, cogí a Zayn por el
brazo y me dirigí al lugar del que venía la risa. Las vi allí. Estaban las dos
tiradas en el suelo, no paraban de reírse. Liz llevaba una camiseta blanca con
un dibujo o una foto, no lo veía bien a esta distancia y Alba llevaba una
camiseta morada. Estábamos llegando a donde estaban, no nos habían visto. ¿Cómo
reaccionarían al vernos?
[Narra
Liz]
Creía
que me iba a partir en dos de la risa. Apenas podía respirar. Llevábamos unos
quince minutos sentadas en esos incómodos bancos del aeropuerto. Ya habíamos
facturado la maleta. Ahora tocaba la peor parte, esperar. Pero Alba y yo nos estábamos
riendo mucho. No sé ni como habíamos empezado. Le estaba contando mi noche con
Rhys, la cual no fue nada del otro mundo. Me llevó a cenar a un italiano, la
comida estaba buenísima. Hablamos de todo un poco y me dijo que le daba mucha
pena que me fuera, que le habría gustado conocerme más. Mencionó a Harry pero
yo le pedí que dejáramos el tema, no me era agradable pensar en Harry. Y bueno contándole
mi cena estaba cuando Alba hizo una gracia malísima. Yo la continúe, y de
repente estábamos las dos ahí llorando de la risa en el suelo, yo sabía que
estábamos haciendo mucho ruido. Mi risa era muy escandalosa y la de Alba
también. Pero me daba igual, era feliz. Toda la tensión y los malos momentos de
la última semana habían desaparecido. No era capaz ni de articular palabra,
solo reía y reía y ya ni me acordaba por qué.
Me
relajé, me quité una lágrima que quería escaparse de mi ojo. Mientras me secaba
las lágrimas y respiraba para relajarme, alcé la vista. Y allí los vi a los
tres. Harry muy serio, pero andando de forma extraña, Niall con una gran sonrisa
en la cara y Zayn, Zayn andaba patosamente y gesticulaba mucho aunque parecía
que estaba hablando sólo. Me di cuenta de que Alba también los estaba mirando.
La miré, me miró y empezamos a reírnos aun más. La situación no era graciosa en
sí, bueno miento, si que lo era. Allí estaban ellos tres con unas pintas
graciosísimas y nosotras por los suelos riéndonos. Los volví a mirar. Ahora
Niall y Harry estaban algo sorprendidos al vernos reír. Zayn seguía a su bola.
- ¿Qué
mierdas hacéis aquí? – Dije entrecortadamente mientras seguía riendo.
- ¿No
puedes hablar como una persona normal? Mira el escándalo que estas montando… –
Dijo Harry.
¿Pero que se creía? Iba a dejarle dos cositas muy claras cuando
Zayn habló:
- ¡Venimos
a rescataros! ¡Si señor! - Dijo muy convencido.
- ¿A
rescatarnos? – Preguntó Alba riéndose - ¿Zayn estás bien?
- Está borracho – Dije riendo – No hay más que
verlo.
- Sólo
un poquito – Dijo mientras juntaba el dedo gordo con el índice.
-
Bueno, ya en serio ¿que hacéis aquí? – Preguntó Alba.
-
Bueno, pues… Nos hemos enterado de que ha sido Eleanor quien inventó y vendió
la historia. Y, bueno, pues…
- No
queremos que os vayáis. Además ahora no hay razón para que os vayáis- Dijo
Niall, viendo que Harry no era capaz de continuar.
- ¿Es
eso Harry? ¿No queréis que nos vayamos? – Le pregunté. Quería escuchar la
respuesta de sus labios.
- Sí. Bueno,
ninguno de nosotros quiere que os vayáis. O al menos que os vayáis sin saber la
verdad – Dijo ruborizado.
- Pues
ya es tarde… ¿No crees? – No pensaba perdonarlo tan fácilmente – No nos creísteis
desde el principio y ahora sabes que tenemos razón… ¿No tienes nada que decir?
- ¡Yo
os creí desde el principio! – Chilló Zayn – Por cierto, ¿ese es Snape? – Dijo
señalando mi camiseta.
- Si –
Contesté orgullosa.
-
Friki… - Oí que decía Harry por lo bajini.
- ¿Eso
es todo lo que tienes que decir al respecto? – Me sacaba de quicio.
- Lo
siento Liz. Y sobre todo lo siento mucho Alba – Dijo. Se le notaba arrepentido,
pero yo estaba enfadada.
- Bueno
no pasa nada. Al final sabéis la verdad y eso es lo importante – Dijo Alba, me
apostaba lo que fuera a que no le costaría tan poco perdonar a Louis.
- ¿Os
vais a quedar entonces? – Preguntó Niall.
- No –
Dije rotundamente – No tenemos, piso, ni trabajo, ni nada… Además ya hemos
facturado.
- Os
quedáis con nosotros – Dijo Zayn entusiasmado – Harry y Louis tienen camas de
sobra, ¿verdad Harry?
- Si, y
es lo mínimo que podemos hacer después de no haber confiado en vosotras.
- No sé,
no me parece bien – Dijo Alba.
-
Venga, hasta que encontréis un piso para vosotras – Insistió Niall.
- No –
Dije de nuevo - Además no tenemos trabajo para pagaros un alquiler o algo y ya
hemos facturado.
Creo que nuestra aventura en Londres ha acabado.
Una voz
se escuchó por todo el aeropuerto ‘Pasajeros del vuelo…’. Teníamos que
embarcar.
-
Tenemos que irnos – Dije.
- Si. Adiós
chicos. Me alegro mucho de haberos conocido – Dijo Alba mientras se despedía
con un abrazo de todos ellos - Mantendremos el contacto.
- Eso
seguro – Apuntó Niall.
Yo
también le di un abrazo a Niall y a Zayn, quien nos los estaba dando de forma
muy efusiva. Cuando estuve delante de Harry, no fui capaz de abrazarlo. Me
había hecho mucho daño. Aún así sabía que si lo abrazaba, que si él me rodeaba
con su brazos, jamás me querría separar de él.
- Adiós
Harry – Le dije mirándolo a los ojos.
- Por
favor… – Dijo él.
Me dí
la vuelta. Fue lo único que dijo. ‘Por favor’. Había sonado tan sincero que se
me habían olvidado los motivos por los que estaba enfadada con él. Pero seguí
andando. Entonces la mano de Alba agarró la mía.
Me paré y la miré. Sabía lo
que me quería decir sin palabras…
-
¿Segura? Ya nos han hecho daño… ¿Nos vamos a arriesgar? – Le dije.
- ¡Joder
Liz! Tenemos dieciocho putos años, si no corremos aventuras y hacemos locuras
ahora, ¿cuándo las haremos? Además se supone que tú eres la loca y yo la
sensata, y si la sensata dice que lo hagamos tú no tienes ni que dudar. – Dijo
con una enorme sonrisa.
Le
sonreí, me di la vuelta y grité:
- ¡Eh
vosotros! – Los tres, que ya se estaban dirigiendo a la puerta, se dieron la
vuelta – Hemos cambiado de idea.
-
¡¡GENIAL!! – Gritó Zayn mientras corría hacia nosotras y nos daba un fuerte
abrazo – ¡Si es que yo lo sabía! Cuando os vi la primera vez, sabía que
seriamos amigos…
- Para
ya Zayn, vas a conseguir que no te dejemos beber más – Dijo riendo Niall cuando
llegó hasta donde estábamos – Me alegro mucho de que os quedéis. Os tenemos que
recompensar por todo.
Harry
no se movió del sitio. Levanté la mirada y mis ojos se cruzaron con los suyos,
sonrió. Y entonces dijo:
- Me
dais vergüenza ajena, por favor. Vámonos ya.
Llegamos
hasta donde estaba él.
- ¿Seguro
que no hay problema con que nos quedemos? Ya sabes, Eleanor y eso ... –
Preguntó Alba.
- Eleanor
te aseguro que ya no será un problema – Dijo Niall.
La cara
de Alba se iluminó un poco. Sabía que estaba contenta de oír eso, pero a la vez
sabía que aun recordaba la conversación que tuvo con Louis. Aún no me había
contado que fue lo que hablaron, pero no debió ser muy agradable.
-
Parece que no me voy a deshacer de vosotras, ¿eh? – Comentó Harry con una
sonrisa, pero mientras lo decía me miraba a mí.
-
Perdona imbécil, pero has sido tú quien ha insistido…’Por favor…’ – Dije
imitando su voz.
- ¡Eres
imposible! Siempre te cargas los momentos bonitos – Me dijo mientras movía la
cabeza negando.
- Bah…
Cállate y aprende a andar que no sabes – Le dije riendo mientras le señalaba.
- ¡Qué
son los zapatos de Niall, idiota! – Dijo a la defensiva.
- Eh,
eh. Sin insultar – Le dije intentándome poner seria – Que soy mayor que tu y me
tienes que respetar.
- Mayor
que yo y sin carnet de coche, ¿no te da vergüenza? – Dijo mientras abría la
puerta del coche y se montaba.
- Eso
no tiene nada que ver- Le dije sonriéndole.
- ¡Copiloto!
– Gritó Zayn.
- No
que me vas a distraer – Dijo Harry muy serio.
-
Venga, va, por favor – Insistió.
- Vale,
pero te callas y te me relajas ¿eh? Cómo tengamos un accidente verás…
- Vaaaale
papá – Dijo Zayn mientras se subía en el asiento de al lado del conductor.
Yo me
senté justo detrás de Zayn. Alba iba en medio y Niall detrás de Harry. Dónde
estaba sentada veía perfectamente como conducía Harry. Me gustaba mirarlo. Estaba
muy serio y concentrado.
- Mirad
a Harry, está ultra concentrado – Comentó riendo Zayn.
Y muy
guapo. Añadí yo en mi mente. No. No. Harry me había hecho daño. No había
confiado en mí, y aunque lo estaba intentando arreglar, yo no podía perdonarlo así
tan fácil. No me parecía bien irme con ellos cuando aún estaba resentida, pero
Alba tenía razón, oportunidades así hay una en un millón. No la pensaba
desaprovechar. Y aunque un día le perdonase, yo seguía con mi idea de que no me
iba a enamorar de Harry. Ni de Harry Styles. Ni de Harry el ligón. Ni el Harry
que sonríe con los ojos. Ni del Harry que tiene unas manos de hombre a pesar de
que es un crío. Ni del Harry…
- Liz –
Me llamó Alba - ¿Crees que estamos haciendo lo correcto? – Me había hablado en
español y muy bajito.
- Pero
si eras tú quien decía… – Le empecé a decir – No sé… Lo que sí sé es que es
mejor que volvernos a España. Y que va a ser toda una experiencia – Le sonreí.
- ¡De
español nada que no os entiendo! ¡Y no sé si estáis hablando de lo bueno que
estoy! – Dijo Zayn desde el asiento de delante.
- ¡No
por dios Zayn! Las verdades las decimos en inglés para que nos entiendas –
Comentó riendo Alba.
- ¡Zayn
guapo! – Grité yo en ingles.
- Eh eh
¿Y el rubio qué? – Dijo Niall mirándonos.
- ¡Niall
guapo! – Grité de nuevo – Ni pienses que voy a decir Harry guapo, ¿eh? No sé
mentir… –
Continúe.
- Ni se
me había pasado por la cabeza – Contestó Harry. Estaba sonriendo.
- ¡Dios
mío! ¡Ha hablado! – Dijo Zayn – Yo ya creía que se desconectaba o algo cuando
conducía.
El
camino al bloque de apartamentos se hizo corto mientras decíamos tonterías. Una
vez Harry aparcó subimos a su apartamento con las maletas. Nos costó trabajo
recuperar la maleta facturada pero al final nos la dieron. Aunque claro,
perdimos el dinero.
Cuando
estuvimos en el salón del apartamento me di cuenta de lo cansada que estaba. No
había vuelto muy tarde de la cena con Rhys, pero aun así no pude dormir, y todo
el ajetreo del aeropuerto me había dejado exhausta. Eran ya las ocho de la
mañana. Podía dormir hasta la hora de comer.
- Con
permiso voy a dormir. Después ya hablaremos y eso. Pero antes necesito seriamente
una cama – Dije.
- Ya
sabes donde está el cuarto de invitados – Me dijo Harry – Yo también me voy a
dormir, estoy agotado.
- Yo de
momento no tengo sueño. Me quedaré viendo la tele un rato o algo. Si no te
importa, claro – Dijo Alba mirando a Harry.
- No
para nada. Estáis en vuestra casa. Hasta luego chicas.
- Hasta
dentro de unas horas – Le sonreí a Alba.
El
camino al cuarto de invitados y al de Harry era por el mismo pasillo. No
hablamos nada. Yo iba muy digna delante de él camino de la habitación. Justo
cuando estaba abriendo la puerta escuché que decía:
- Me
alegro de que te hayas quedado Liz.
Fui a
contestarle, pero ya se había metido en la habitación. Así que sonreí y me metí
también en la mía. Me quité lo zapatos y me dejé caer en una de las camas de
invitados. Apenas me dio tiempo a pensar nada, el sueño me venció en cuanto
cerré los ojos. Sabía que cuando despertara tendríamos varias cosas que
aclarar. Pero eso sería cuando despertará.
[Narra
Louis]
No
sabía que hora era. No había pretendido dormirme, pero el sueño llegó sin darme
ni cuenta. Eleanor se fue sobre las cinco y media. Y creo que no iba a volver
por aquí nunca más. Me dolía pensarlo, habían sido muchas cosas juntas. Pero lo
que había hecho superaba todas las cosas buenas. Eso no lo podía perdonar.
Además algo en mi interior sabía que la relación no iba bien desde hacía
tiempo. Cuando Eleanor se fue busqué a Harry, pero no estaba por ningún lado.
Así que me encerré en mi habitación. Necesitaba a mi mejor amigo, a mi hermano.
Pero bueno, también necesitaba pensar. Y mucho. Lo de Eleanor había sido como
una bofetada en toda la cara. No me lo esperaba para nada, pero ahora que lo
pienso no es nada sorprendente, la creo muy capaz de hacer lo que hizo.
Cuando
salí del cuarto me la encontré con la cara triste y con rastros de haber estado
llorando. Nos sentamos en el sofá y le pregunté que de qué quería hablar
conmigo. Al principio dio muchos rodeos, algo típico en ella. Siempre tardaba
mucho en decir las cosas. Me habló de nosotros, de nuestra relación, de sus
sentimientos hacia mí. No entendía a que venía todo esto. Claro, aún no sabía
qué era lo que me había venido a decir. Me repitió mucho que me quería y que lo
sentía.
- Sé que
me quieres – Le dije ya cansado.
- Pero tú
a mi no. Ya no. Si no, en vez de decirme ’Sé que me quieres’ me habrías dicho:
Yo también te quiero – Empezó a llorar – Por eso…Por eso lo hice, para
recuperarte. Yo no sabía que iba a causar tanto
daño.
- ¿Qué
es lo que hiciste? – Le pregunté intrigado.
- Yo vendí
la historia – Tras esas palabras la miré con los ojos espantados. No había
dicho nada más y ya sabía de qué estaba hablando. Continuó – Fui a hablar con
Niall a su casa, pero estaba con ‘ella’, así que ya que estaba ahí fui a
recoger una película que le había dejado hacía tiempo. Entonces… Entonces les oí
hablar. Dijeron que no debía enterarse nadie de lo que había pasado esa noche.
Yo pensé, pues que se habían acostado, era lo normal… – No dejaba de mirarla
sin creérmelo. Antes le sujetaba la mano, pero le había soltado
inconscientemente en cuanto lo dijo. – Mientras iba camino a casa, fui pensando.
‘Ella’ nos estaba dando muchos problemas… A mi quiero decir, a nuestra
relación. En dos meses se iría de aquí. No pensé que os importaban tanto. Así
que, ¿qué más daba que pensarais que os habían traicionado? Ellas seguirían su
camino, vosotros el vuestro. No creía que se iba a liar la que se lió. Tampoco
les quería hacer daño a ellas. Solo quiera… Dios, no sé…
- Sólo
querías alejarlas de nosotros. De mí – Dije levantándome comprendiéndolo todo.
- Si –
Me miró llorando – Pero obviamente no era la forma…
-
¡¡CLARO QUE NO ERA LA FORMA ELEANOR!! ¿¿¡PERO EN QUE ESTABAS PENSANDO!??
A
partir de ahí todo lo que recuerdo eran gritos y más gritos. Tu hiciste no se qué.
Pues tú dijiste esto... Sólo nos echábamos cosas en cara… Pero lo que ella había
hecho superaba todas las cosas malas que pudimos haber hecho en el pasado en nuestra
relación. Pero también superaba todas las buenas, las anulaba. Ella no lo
entendía. Quería que la comprendiera que me pusiera en su lugar. Pero no pude,
ni ahora ni nunca. Yo no sería capaz de hacer una cosa así. Y no, no quiero una
novia que si que sea capaz. Fue la peor pelea de mi vida. Y aunque ahora me
sentía como si estuviera liberado, también me sentía defraudado y traicionado
por ella, triste por todo lo que habíamos vivido. Y mal, muy mal por lo que le había
hecho a Alba… Le dije cosas horribles, que no se merecía ni aunque hubiese sido
ella. Pero ahora que sabía que no había sido ella aún me sentía peor. No sabía
como lo iba a solucionar, pero tenía que hacerlo.
Tenía
algo de hambre. Eran las doce de la mañana, lo había mirado en el reloj de la
mesilla. Me levanté. Iría a la cocina, cogería algo de comer y volvería a mi
habitación. Salí de la habitación pensando en cuando volvería a ver a Alba. En
cuando tendría la oportunidad de poder pedirle perdón… Y de repente estaba ahí,
mirándome con esos grandes ojos desde el sofá de mi salón.
- Eeeh,
¿qué haces aquí? – No sabía que decir, no esperaba verla tan pronto y menos en
mi casa.
[Narra
Alba]
¡Genial!
Esto era lo mejor que me podía pasar. Harry dormido, Liz dormida y Louis ahí
mirándome. Tenía que ser yo quien le explicara todo. Perfecto. Dios, tenía
bastante mala cara… Aun así estaba increíble con ese pijama y el pelo revuelto.
- Pues,
a ver… Los chicos vinieron a buscarnos al aeropuerto cuando se enteraron de
quién había sido en realidad… – No quise nombrar a Eleanor. No quise hacerlo
por él, pero tampoco quería hacerlo por mí.
- ¿Al
aeropuerto? – Me preguntó extrañado.
- Si. Pensábamos
irnos a España esta mañana. Pero los chicos nos pararon y, bueno, no teníamos
donde volver así que Harry se ofreció a que nos quedáramos aquí, mientras
encontráramos algo…
- ¿Liz
está también aquí? ¿Con Harry? – Preguntó. No se había movido del sitio en todo
el tiempo.
- Si.
Bueno, no con Harry – Aclaré- Está en el
cuarto de invitados. Yo también dormiré allí. Pero no tenía sueño, así que me
he quedado viendo la tele. - Seguía enfadada con Louis. Muy enfadada. Pero
obviamente le tenía que dar una explicación de por qué estaba sentada en su
sofá.
No dijo
nada más. Se fue a la cocina, cogió algo por el ruido que hizo y volvió a desaparecer
por el pasillo. En realidad se lo agradecía. No tenía muchas ganas de hablar y
creo que él tampoco, lo cual era normal después de haberse peleado con su
novia. Pero sabía que algún día tendríamos que hablar. Íbamos a vivir bajo el
mismo techo durante un tiempo, al menos este fin de semana. Y si nos íbamos a
quedar aquí e íbamos a ver más a los chicos
tendríamos que arreglarlo. Pero obviamente no sería yo quien diera el
primer paso, esperaba que el fuera el que quisiera hablar. Era lo mínimo. Fue
él el que no me creyó… A decir verdad seguía muy molesta con él, me había hecho
daño. Después de la semana que pasamos con los chicos, que él me tratase así
fue lo que más me dolió. Ya no sería lo mismo aunque lo arreglásemos. O eso
quería hacerme creer a mi misma…
Me
aburría. Pero no tenía sueño. La tele me había entretenido durante toda la
mañana, pero ver la televisión en inglés me daba dolor de cabeza. Eran ya la
una y media del mediodía. Lo mejor era ir a despertar a Liz. Ya había dormido
demasiado.
Iba por
el pasillo camino de la habitación de invitados cuando una puerta a mi derecha
se abrió. Creo recordar que esa era la habitación de Harry. Efectivamente su
cabeza llena de rizos apareció por ella.
- ¡Hey!
Buenos días ¿Dónde vas? – Me preguntó desperezándose.
- A
despertar a Liz. Odia que la despierten y se pone de muy mal humor. Me encanta
¿quieres venir?
- ¿A
fastidiar a Liz? Obviamente – Respondió riendo.
Me fijé
bien. Iba en bóxers. Intenté no fijarme mucho más. Llegamos a la habitación de
Liz, pero antes de abrir le miré y le dije:
- No
hace falta que seas cuidadoso. A Liz le puede caer una bomba al lado que no se
despierta. Pero cuando yo te avise empieza a hacer mucho ruido y nos tiramos
encima de ella y saltamos y eso ¿vale?
- Oído
cocina – Dijo.
Abrí la
puerta sin preocuparme por el ruido. Y allí estaba ella. Dormía en una postura
bastante complicada, se le veía incomoda. Pero no parecía darse ni cuenta. Tenía
todo el pelo revuelto por la cara y las sabanas desparramadas por todas partes.
Harry se enderezó, me miró y comentó:
- No
sabe ni dormir como una persona normal. Esa postura tiene hasta que doler – Estaba
riendo, pero yo me fije en cómo la miraba.
- Una,
dos y… ¡Tres!
Nos
tiramos encima de Liz dando saltos y gritando. Yo empecé a gritar en español
cosas que sabía que Harry no entendería:
- ¡Despierta
ya y deja de tener sueños guarros!
Harry
dejó de gritar y empezó a cantar muy fuerte. Pero como tenía una voz preciosa, más
que molesto era un privilegio escucharlo. Yo me callé y de repente Harry se
calló y solo se oían unos atronadores gritos mitad inglés mitad español…
-
¡¡JODER, OSTIA PUTA YA!! – Liz había despertado, pero seguía tumbada en la cama.
- ¡Elizabeth,
por dios! ¡Esa boca! – Le dije yo riendo y dejándome caer en la cama al lado de
ella.
Harry
se bajó de la cama y volvió a cantar. No conocía la canción, parecía una
canción infantil.
Finalmente
Liz se incorporó.
-
Espero que todos los días no me despertéis así por que os mataré. Ya me estoy
arrepintiendo de quedarme aquí.
- No te
flipes que el privilegio de verme la cara nada más que te levantas solo lo
tendrás una vez – Dijo riendo – Voy a llamar a una pizzería para almorzar.
Cuando
Harry se fue Liz me miró muy seria. Todo lo seria que podía estar con todo el
pelo revuelto, claro.
- ¿Qué
vamos a hacer? Bueno de momento comer, me muero de hambre – Dijo.
- Me he
encontrado a Louis. No se, ha sido… raro – Se lo solté así de repente. Le conté
toda la conversación que tuvimos y por primera vez, al recordarla, no me
entraron ganas de llorar. Necesitaba hablarlo.
Me miró
y me abrazó cuando terminé de contárselo todo. Sabía lo que ella opinaba. No
hacía falta que me lo dijera, la conocía bien. Sabía que no quería que me
hicieran daño y sabía su opinión de que salir, amorosamente hablando, con ellos
no nos iba a hacer ningún bien. Sabía que ahora mismo quería coger a Louis y
pegarle por lo que me había hecho, pero también sabía que no lo haría por mi y
que me dejaría tomar las decisiones que yo considerara. Porque así éramos
nosotras. Así era nuestra amistad. Le rugió el estómago. La miré y reí.
- Anda
vámonos fuera que las pizzas tienen que estar al llegar.
Y tenía
razón, las pizzas no tardaron en llegar. Y con las pizzas llegó Niall. Le había
preguntado por WhatsApp a Harry si se podía unir. Louis no salió de la
habitación. Hablamos de todo un poco, nos reímos mucho recordando a Zayn borracho.
Al parecer aun seguía durmiendo la resaca.
- ¿Qué
vamos a hacer? – Pregunté. Todos sabían a que me refería. Tampoco era plan de
que nos
quedáramos allí de ocupas…
- Yo voy
a llamar a Rhys – Dijo Liz y Harry la miró sorprendido- A ver si puedo recuperar
el empleo… Puede que aún esté a tiempo – Continúo haciendo caso omiso a la
mirada de Harry.
- Aun así
tendré que encontrar yo también un trabajo y tenemos que hablar con el casero a
ver si no ha encontrado a otros inquilinos.
- Mira
hacemos una cosa – Dijo Harry – Os quedáis aquí este fin de semana y ya el
lunes os ponéis a buscar otra casa o lo que sea. A nosotros no nos importa que
estéis. Bueno no lo he hablado con Louis, pero no creo que le importe – Yo tenía
serias dudas sobre lo que le podía parecer a Louis, pero me callé.
-
Perfecto – Dijo Niall- Entonces, ¿qué hacemos esta noche? Este fin de semana no
trabajamos…
-
Deberíamos salir para celebrar… ¡Ostia! Mi hermana viene de Chesire hoy. He
quedado con ella para cenar, pero después me uno a donde estéis.
- Vamos
a la discoteca de siempre, ¿no? Allí nunca tenemos problemas y está muy bien –
Propuso Niall.
-
Perfecto, os veré allí – Dijo Harry.
[Narra
Liz]
La
tarde se había pasado volando. Y no habíamos hecho nada del otro mundo. Vimos
un poco la tele. Los chicos se fueron a ensayar por la tarde. Fue el único
momento en el que ví a Louis. Salió de la habitación para irse a los ensayos,
nos saludó moviendo la cabeza pero no dijo nada. Mejor. Si hubiera abierto la
boca a lo mejor le habría metido el puño por ella. No le iba a perdonar fácilmente
lo que le había hecho a Alba.
Llamé a
Rhys y me dijo que se alegraba mucho de que al final me quedase y que no habría
problema con el trabajo puesto que aún no había avisado a su tía. Quedamos en
vernos esa noche en la discoteca para celebrar que me quedaba. No tuvimos tanta
suerte con el casero. Él muy rápido ya había encontrado otros inquilinos. Ahora
teníamos que buscarnos otro apartamento igual de barato. Esperaba que lo
encontrásemos porque no me quería pasar el verano entero en la misma casa que
Harry. Aún estaba enfadada con él, no quería deberle dos mese de estancia en su
casa. Aunque me costase más reconocerlo también tenía miedo de que cuanto más
tiempo pasase con él, menos fuerza tendrían mis inteligentísimos razonamientos
de por qué no me convenía.
A las
nueve y media estábamos delante de la puerta de la discoteca. El horario de
fiesta de los ingleses era muy diferente del de España, a esta hora se estaba
cenando. Yo llevaba una falda de tubo verde y una camiseta super corta blanca y
anchita, si levantaba los brazos se me veía parte de la barriga. Lo combiné con
unos tacones marrones y me recogí el pelo en una trenza desenfadada que había
aprendido hacer gracias a un video del Youtube. Alba llevaba unos shorts de
encaje negro con una camisa coral. Se puso sus tacones beige. El pelo lo
llevaba recogido en una cola alta. Le sentaba bien el pelo recogido. Al rato de
estar dentro de la discoteca nos encontramos con Danielle y Liam. Zayn no había
salido esa noche, no estaba del todo recuperado de la borrachera de ayer. Me
encontré con Rhys al rato y nos fuimos a bailar juntos a la pista.
- No
sabes lo contento que estoy de que te quedes – Me dijo.
- Y yo
de que no le dijeras nada a tu tía. De verdad. Necesito el trabajo – No le miré
a los ojos como tenía por costumbre. Tenía el presentimiento de que algo
pasaría si lo hacía.
-
Enserio Liz – Me levantó la cara sujetándome la barbilla con la mano – Me
alegro muchísimo.
- Ya
yo… - No pude terminar. Me estaba besando.
[Narra
Harry]
Acababa
de entrar en la discoteca. Había dejado a mi hermana en el hotel y había ido lo
más rápido posible a la discoteca. Quería estar con los chicos, y con Liz y
Alba también. Los busqué con la mirada y los vi en la Zona VIP dónde siempre
nos poníamos. Mientras me dirigía hacía allí me fijé en que Liz no estaba con
ellos. Habría ido al servicio o algo. Seguí mi camino y de repente la vi.
Estaba en medio de la pista. Estaba con Rhys. Estaban besándose...
Me encanta de verdad, siguela, escribes genial Fan1:)! PD: Pasate por la mia:)
ResponderEliminar